ESTRATEGIAS DE APRENDIZAJE DE MATEMÁTICAS LONGITUDES: ESTRATEGIA 1. Medir mucho y medir de todo Utilizar medidas no convencionales antes de introducir las convencionales, así: - Mido con cuartas, - pies, - pasos, - brazadas, - codos. Luego , recién emplear las convencionales a través de vivencias como: - Subir gradas indicando que hacia arriba se divide y para bajar de peldaño en peldaño se multiplica. JUSTIFICACIÓN: La práctica habitual y sistemática de mediciones de todo tipo de longitudes, es un recurso didáctico que, además de ser motivador para el alumnado, supone la adquisición de la capacidad de interpretar mejor las características de objetos, lugares y puede contribuir de forma indirecta a adquirir conceptos geométricos . ESTRATEGIA 2: Iniciar siempre con unidades no convencionales, decir por ejemplo: ¿Cuántos lápices mide tu libro? ¿Cuántos borradores mide tu carpeta? ¿Cuántos pasos hay desde mi casa al colegio? ¿Cuánto mido en codos, en palmas? ¿Cuál es el perímetro de mi cuaderno en deditos? ¿Cuánto mide en cuartas la diagonal de mi carpeta? Confeccionar una escalera de cartulina de colores y hacer que cada niño y niña se desplace por ellas de peldaño en peldaño, haciendo vivenciar indicando con énfasis que si subimos dividimos y si bajamos multiplicamos: JUSTIFICACIÓN: La práctica habitual y sistemática de mediciones como perímetro, diagonal, radio, diámetro, lado, base, altura, es un recurso didáctico que, además de ser motivador para el alumnado, supone la adquisición de la capacidad de interpretar mejor las características de objetos, lugares y puede contribuir de forma indirecta a adquirir conceptos geométricos de forma natural. SUPERFICIES: ESTRATEGIA 1 Hacer estimaciones y luego comprobar: ¿Cuántas hojas bond crees que caben en tu mesa? ¿Cuántas hojas bond caben en tu mesa? ¿Cuántos libros caben en tu silla? Algo así: Confeccionar cuadrados de 1 cm, para medir cuantos cuadraditos hay en el forro de su cuaderno. Confeccionar cuadrados de 1m y medir la plataforma deportiva: ESTRATEGIA 2 Diseñar para cada grupo diferentes figuras geométricas e invitarlos a hallar el área contando los cuadraditos. De preferencia iniciar con figuras sencillas como el cuadrado, el rectángulo;algo así: JUSTIFICACIÓN: La práctica habitual y sistemática de mediciones, así como hallar áreas dan sentido al esfuerzo del alumnado para adquirir conceptos y destrezas matemáticas, pues se les ofrece la posibilidad de aplicarlos a situaciones prácticas.

NOMBRES Y APELLIDOS:………………………… UN LORO, UN MICO… Un señor de Puerto Rico Colgó en su balcón un loro de rica pluma y buen pico, un loro que era un tesoro y a su amo costó un pico. Un vecino suyo, moro de Tetuán recibió un mico. Y a este mico, lo ató el moro en su balcón ante el loro, que así quedó frente al mico. .. Tanto y tanto charla el loro, que un día se enfada el mico, y con la furia de un toro lo embiste; se esconde el loro, rompe la cadena el mico, salta a la jaula del loro, sale el loro, pica al mico chilla el mico, grita el loro, Se asoman, al ruido, el moro y el señor de Puerto Rico. “¿Por qué no encierra a su loro?” “¿Por qué no ata bien su mico?” exclaman los dos, a coro. Y uno le echa mano al loro y el otro tira del mico. Cae el mico sobre el loro, el loro le clava el pico, los dientes rechina el mico y, asustado, muerde al loro y al señor de Puerto Rico. Este reniega del loro y jura matar al mico, mientras furibundo, el moro, provoca al amo del loro y embiste al loro y al mico. Hacia arriba vuela el loro, se escurre hacia abajo el mico, y, faltando al decoro, caen agarrados el moro, y el señor de Puerto Rico. “¡Ay, moro, si pierdo al loro!”, exclama el de Puerto Rico, y airado replica el moro: ¡¡Pagará caro tu loro, cristiano, si pierdo el mico!” Les imita arriba, el loro, muecas hace, abajo, el mico, y no se sabe si el moro es quien habla, o si es el loro, o el señor de Puerto Rico. Crece el trajín: vuele el loro, y la policía buscando el orden coge al mico al loro , al moro y al Señor de Puerto Rico. Recreación de la Profesora Marina Quispe Pineda.

NOMBRES Y APELLIDOS:………………………… UN LORO, UN MICO… Un señor de Puerto Rico Colgó en su balcón un loro de rica pluma y buen pico, un loro que era un tesoro y a su amo costó un pico. Un vecino suyo, moro de Tetuán recibió un mico. Y a este mico, lo ató el moro en su balcón ante el loro, que así quedó frente al mico. .. Tanto y tanto charla el loro, que un día se enfada el mico, y con la furia de un toro lo embiste; se esconde el loro, rompe la cadena el mico, salta a la jaula del loro, sale el loro, pica al mico chilla el mico, grita el loro, Se asoman, al ruido, el moro y el señor de Puerto Rico. “¿Por qué no encierra a su loro?” “¿Por qué no ata bien su mico?” exclaman los dos, a coro. Y uno le echa mano al loro y el otro tira del mico. Cae el mico sobre el loro, el loro le clava el pico, los dientes rechina el mico y, asustado, muerde al loro y al señor de Puerto Rico. Este reniega del loro y jura matar al mico, mientras furibundo, el moro, provoca al amo del loro y embiste al loro y al mico. Hacia arriba vuela el loro, se escurre hacia abajo el mico, y, faltando al decoro, caen agarrados el moro, y el señor de Puerto Rico. “¡Ay, moro, si pierdo al loro!”, exclama el de Puerto Rico, y airado replica el moro: ¡¡Pagará caro tu loro, cristiano, si pierdo el mico!” Les imita arriba, el loro, muecas hace, abajo, el mico, y no se sabe si el moro es quien habla, o si es el loro, o el señor de Puerto Rico. Crece el trajín: vuele el loro, y la policía buscando el orden coge al mico al loro , al moro y al Señor de Puerto Rico. RECREACIÓN DE LA PROFESORA MARINA QUIPSE PINEDA Con cariño.